Prótesis dental

La prótesis dental sirve para reponer la forma y la función de los dientes que están dañados o ausentes. Son un sustituto artificial de los dientes naturales, fabricadas en materiales acrílicos y resina, plásticos especiales, a veces metales ligeros, y están diseñadas para parecer reales.
Existen dos tipos de prótesis dental:
Prótesis fija o puente dental: sirve para reponer uno o varios dientes perdidos pero no se puede retirar la prótesis de la boca, como los dientes naturales. Hay 2 tipos:
Prótesis fijadas sobre dientes: Se tallan los dientes adyacentes al espacio que ha quedado por la pérdida de la pieza actúando como dos apoyos o pilares del puente. Se cubren con unas fundas y se añade el diente que se ha perdido entre ambos.
Hay que valorar si se pueden realizar otras opciones más conservadoras que permitan reponer el diente perdido (como los implantes dentales) porque esta opción conlleva tallar dientes sanos
Prótesis fijadas sobre implantes: En lugar de tener dientes como pilares de apoyo lo que tenemos son implantes.
El puente dental se coloca sobre los implantes que sustituyen las raíces de las piezas perdidas.
Prótesis dental removible o dentadura postiza: Este tratamiento es útil en pacientes que han perdido muchos dientes y no hay apoyo dental suficiente para poner la prótesis fija (excepto que se colocasen implantes dentales). Las prótesis dentales removibles son recomendables para un perfil de paciente adulto que haya perdido su dentadura y que necesite una rehabilitación económica de toda la boca.
También existen prótesis dentales removibles denominadas sobredentaduras, que combinan el soporte por implante con el tejido blando del sistema mandibular.